MENORCA, a solo 35 kilómetros al este de la isla de Mallorca, es sin duda
una de las islas más bellas del mar Mediterráneo. Conocida como la isla
de la calma, estalla de alegría durante sus tradicionales Fiestas de Sant
Joan, en las que jinetes y caballos se funden en un tumultuoso festejo
ritual, que tiene sus primeros orígenes en el siglo XIV.
Por primera vez desde hace más de cien años, y con el solo intervalo de la Guerra Civil española, este 2020 ha dejado de celebrarse debido a la pandemia.
Conversación con el periodista Bep Allès, director del Semanario
Cultural El Iris, sobre las particularidades de esta fascinante fiesta. A la
charla que contará con espectaculares imágenes, se nos unirán dos
representantes de las nuevas generaciones, la dramaturga Noemí
Carrasco y la estudiante de pedagogía Marta Villalonga.
Breve historia de la isla
Menorca conserva un notable legado de su época prehistórica,
especialmente de la cultura megalítica de la que se conservan bastantes
monumentos. Con el devenir de los siglos la isla fue visitada por los
fenicios, los griegos, los cartagineses y los romanos (122 a.c), que se
establecieron por un periodo de tiempo, hasta que a la caída de su imperio
la isla paso a mano de los vándalos y posteriormente los bizantinos, pero
fueron los musulmanes quienes se afincaron en la isla en el 903,
permaneciendo a lo largo de cuatro siglos, hasta que los cristianos del
Reino de Aragón, con los que llegaron los catalanes a la isla, en el 1287
conquistaron la isla. En la edad media hubo épocas de esplendor y
también de crisis. Pestes, plagas y piratería amenazaron con dejar la isla
deshabitada. En el siglo XVI sufrieron dos brutales ataques con
destrucción y saqueo por parte de los corsarios turcos. El primero al
mando del mítico Barbarroja, que masacró la población de Mahón,
llevándose 600 prisioneros de los que nunca más se supo (1535) y el
segundo, aún más terrible, en 1558 en el que durante tres días saquearon
e incendiaron Ciudadela, llevándose cautivas 3.452 personas.
Entrados ya en la era moderna fruto de la Guerra de Sucesión (guerra
dinástica entre Borbones y Austrias), al trono de España que dejo sin
descendencia Carlos II. Los ingleses tomaron la isla en 1708 y
permanecieron más de 70 años, con la sola interferencia en que Francia
los expulsó en 1756 para devolverles la isla en 1763. Finalmente la isla
volvió definitivamente a España a principios del siglo XIX.
Menorca se apuntó a la revolución industrial, siendo una de las pocas islas
con una floreciente industria (calzado, bisutería, licores, productos lácteos
y agrícolas), eso le favoreció cuando se produjo el boom turístico de los
años 60, ya que al mantener una riqueza propia, legisló y evitó que se
cometieran las aberraciones urbanísticas que dañaron la naturaleza en
otros lugares. Ahora la industria ha decaído, pero Menorca conserva
bastante virgen y cuidado su entorno natural.
Los árabes dieron el nombre a la isla, Al-Manurka (Menorca), los
cartagineses bautizaron la ciudad de Magón (Mahón-Maó) y los romanos
la de Civitatella (Ciudadela-Ciutadella). Los ingleses favorecieron la
industria, el gusto por la ginebra (el típico ginet menorquín), les llevaron la
Cruz de Malta y el gusto por los juegos con lanza que forman parte de la
tradicional Festa de Sant Joan. Los franceses dejaron su legado, que aún
mantienen en la población de Saint Louis (San Luis-Sant Lluis).
FESTES DE SANT JOAN
Tiene su origen en el siglo XVI.
Están representados los principales estamentos de la sociedad tradicional
medieval menorquina.
Homo des bé (el hombre del cordero, representante de los payeses, va a
pie y descalzo vestido de cordero al estilo de Sant Joan Baptiste , llevando
un carnero sobre los hombros)
El fabioler (alguacil municipal, hace sonar el fabiol y el tambor. Monta
sobre un asno)
Caixer senyor (representante de la nobleza)
Caixer capellà (representante de la iglesia)
Caixer casat (representante de los artesanos-maestro artesano-casado)
Caixer fadrí (representante de los artesanos-aprendiz-soltero)
Caixers pagesos (representantes de los payeses)
Días y eventos clave de la fiesta
21 de junio. Dia des Bé. Día del Cordero. Visita al Ayuntamiento y recorrido
por las calles de los representantes de los diversos estamentos. Por la
noche las características Hogueras de Sant Joan
23 de junio. Vigilia de Sant Joan
A las 9.00 horas. Primer toc de flabiol. Primer toque de flabiol.
A las 14.00 h. Inicio del Replec (encuentro) de los Caixers
(caballeros), que salen desde sus respectivas casas
montados en sus caballos.
A las 19.00 h. Caragol des Born. Concentración y paseos y muestra
de habilidades en la plaza del Born.
Lanzamiento de avellanas y Romería a la ermita de Sant Joan
Baptista.
24 de junio. Por la tarde. Replec (encuentro) de los Caixers (caballeros),
con sus respectivas monturas, en la Esplanada, junto al puerto. Comienzo
de los Juegos y muestra de habilidades al galope.
25 de junio. Fuegos artificiales.
Be the first to comment